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martes, 18 de agosto de 2020

Reseña: Exemplar poético, de Juan de la Cueva

¡Hola, mis queridos lectores!

La reseña del día de hoy no es sobre una novela o alguna obra de ficción, sino de una poética del Siglo de Oro español que imagino que sólo a los interesados en el tema les interesara conocer. El Exemplar poético de Juan de la Cueva (1543-1612) es una obra que habla sobre los lineamientos que se deben seguir para componer lírica y teatro, existen otros textos que ya reseñé antes que hablan de lo mismo: Philosophia antigua poética del Pinciano (reseña) y las Tablas poéticas de Cascales (reseña).
La edición del Exemplar poético que leí es de José María Reyes Cano, quien en el estudio preliminar del libro expone el trabajo ecdótico que realizó para justificar la elección de la versión que eligió para fijar el texto, la cual es una fechada en 1609, aunque cabe mencionar que encuentra una que está firmada por el autor en 1605. La razón para reproducir el manuscrito de 1609 se debe a que al ser la última y estar también firmada por Juan de la Cueva, se considera la definitiva en ese proceso de escritura que supone crear y corregir. Ahora bien, ya seleccionado el texto, Reyes Cano hace una revisión de las ediciones anteriores y después expone sus consideraciones para editarlo, las cuales fueron conservar las grafías –de ahí que se lea “exemplar” y no “ejemplar”–, aunque unificándolas, y que la puntuación y acentuación se ajustaran a las normas académicas vigentes, excepto en esos casos en los que se pueda afectar el verso, además anota las variantes que hay.

En su estudio, Reyes Cano también alude a que se le debe de conceder más importancia a esta preceptiva, pues fue hecha antes que la de Lope de Vega (Arte nuevo de hacer comedias en este tiempo, 1609, que pueden leer AQUÍ) y al ser “una defensa clara y sin paliativos de la reforma de la  escena, [que] equivale sin duda, a la colocación de la base del denominado ‘teatro nacional’ del Siglo de Oro, lo que lo convierte en un texto básico para el mejor conocimiento del género dramático en los siglos XVI y XVII y la transformación que en estos momentos tuvo que afrontar” (pág. 12).  
El Exemplar poético está dedicado a don Fernando Enríquez de Ribera, está escrito en verso y consta de tres epístolas, puesto que él no desea que su obra sea conocida como un Arte, sino que se le llame epístola, así como la de Horacio, a quien sigue de cerca junto a Aristóteles. La primera epístola habla sobre el verso y el poeta, cuya labor no debe consistir sólo en hacer versos, sino en darle primor al lenguaje, por lo distingue al verdadero poeta del mero versificador, también aborda la mímesis, la fábula o trama y los personajes, aparte de alabar la importancia del ingenio. En la segunda epístola se enfoca en la copla, el romance y aquellas composiciones que denomina “nuevas invenciones” (el verso endecasílabo y el soneto), también alude a la elegía, a los errores en los que incurren los poetas al momento de escribir versos, acerca de retomar textos ajenos y cuando es lícita la imitación, y, sobre todo, cuál es la importancia de los preceptistas. La tercera epístola, por su parte, comienza con su aclaración de que él no quería plasmarla, pero que se lo pidieron, en ella se centra en la octava real y la canción, así como en la composición de las églogas, pero a lo que le dedica más atención es al teatro, del cual brinda los aspectos generales que el observa y la diferencia que hay con la puesta dramática de antes, diferencia entre comedia y tragedia, y da unos cuantos consejos.
La poética o preceptiva de Juan de la Cueva, al igual que otras, aborda los aspectos fundamentales que los poetas y dramaturgos deben tener en cuenta a la hora de escribir, ya que en la manera en la que ornen su lenguaje o demuestren su ingenio, se apreciara si se trata de un texto de calidad o no. Desde luego alude a los clásicos, como Horacio y Aristóteles, que ya desde antes recomendaban lo que era valioso de lo que no, sin olvidar advertir la importancia de conocer las bases del arte para saber imitar para perfeccionar o para innovar. El Exemplar poético aborda el quehacer del poeta, la lírica y el teatro, en cuanto a este último, específicamente, me parece bien que plasme el contraste entre el actual y el de antes, para así ver las transformaciones que se dieron y cómo es que se conformó un modelo que duraría casi un siglo.
         Finalmente, uno de los aspectos que más me gustó fue precisamente leer sobre el proceso de redacción de Juan de la Cueva y cuál fue la transmisión del texto, me parece genial el riguroso trabajo ecdótico que hace Reyes Cano al examinar cada versión y todas las variantes; aparte, el que cuando lo leyera estaba aprendiendo justo ha hacer un trabajo ecdótico me ayudó a entender mejor los términos que utilizaba. Por otro lado, el Exemplar poético me permitió consolidar mi comprensión del decoro en el teatro, ya que no sólo es algo que se observa en el lenguaje, sino también en el comportamiento de los personajes.
         Como nota final, yo saqué el libro de la biblioteca y, como ya lo mencionaba Reyes Cano, hay varias ediciones por allí, de hecho, en la Biblioteca Virtual Miguel de Cervantes lo pueden leer (AQUÍ), ese texto está basado en la edición de Espasa-Calpe.

FICHA: CUEVA, Juan de la, Exemplar poético, edición de José María Reyes Cano, Sevilla: Alfar, 1886, pp. 112 (Serie Ediciones, textos y documentos).

Gracias por leer <3

1 comentario:

  1. ¡Hola! Nunca digo que no a libros de este tipo aunque ahora mismo es cierto que prefiero otras cosillas. Un besote :)

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