¡Hola
de nuevo!
¿Cómo
están? ¿Cómo les va? Yo me he estado acoplando otra vez con el regreso a clases
presenciales y, para ser honesta, me ha estado costando adaptarme a la rutina,
pero siento que ya lo estoy empezando a equilibrar todo de nuevo; además, estos
últimos días, debido a varios asuntos, he experimentado una montaña rusa
emocional que, al final, me ha dejado con el ánimo y entusiasmo de hacer un
montón de actividades, así que a ver qué tal me va… Bueno, ya no me extiendo
tanto, ¡comencemos!
«Era un dragón.
Era un príncipe.
Era una mujer.»
Y todo arde, de Kiersten
White
En
esta ocasión les traigo la reseña de una trilogía que me encantó, sin lugar a
duda se convirtió en una de mis favoritas. Esta trilogía, escrita por Kiersten
White, está conformada por Hija de las
tinieblas (And I Darken, 2016), Renace de las sombras (Now I Rise,
2017) e Y todo arde (Bright
We Burn, 2018), novelas históricas en las que la autora modifica un poco,
aunque significativamente, la Historia –ojo con esa “h” mayúscula–. Kiersten
White nos cuenta la vida del inteligente, astuto y sanguinario Vlad Tepes,
férreo enemigo del imperio otomano y héroe nacional de Valaquia, el personaje
que Bram Stoker usaría de referencia para su famoso Drácula. Vlad Tepes, príncipe de Valaquia, protagonista de esta
historia, sólo que aquí… es una mujer: Lada Dracul.