Reseña: La Bella y la Bestia

¡Hola, queridos lectores!

Y después de tanto, tanto y tanto tiempo… por fin llegó el día en que logré escribir esta reseña y subirla al blog. No los hago esperar más, sean bienvenidos a la tan esperada reseña de La Bella y la Bestia.

La Bella y la Bestia (Beauty and the Beast) siempre ha sido mi película favorita de Disney, era una niña cuando la vi y quedé encantada con las las canciones y los personajes, crecí viendo la película una y otra vez y, sin darme cuenta, Bella se convirtió en un ejemplo a seguir. Recuerdo que le decía a mi mamá que quería ser como ella y, cuando me preguntaba por qué, le contestaba: “ella lee y quiere algo más que vida provincial”; también estaba el hecho de que era un personaje que no encajaba y yo muchas veces me sentía igual en la escuela. Así que cuando se anunció el live action, me emocioné mucho, más cuando me enteré que Emma Watson sería quien encarnaría a tan mítica princesa, ya que ella, como persona, es alguien a quien admiro y, por otra parte, porque interpretó a otro personaje que me ha acompañado durante la mayor parte de mi vida y que significa mucho para mí: Hermione Granger. Todo estaba dispuesto para que esta película fuera perfecta, pero ¿lo fue?

El regreso de un clásico

Vivimos en la época de la nostalgia y la expectación provocada por la reciente película de La Bella y la Bestia en su versión con gente real es una clara prueba de eso. Los anteriores live actions de Disney no habían dado el ancho, por lo que en esta ocasión se apostó por la fidelidad absoluta al clásico animado, especialmente conservando su esencia como musical, de tal manera que los trailers mostraban escenas idénticas a las vistas en la película de 1991. Esto era algo que me fascinaba, pero que me echaba para atrás al mismo tiempo, ¿realmente lo que quería era un calco de la original? ¿El live action cumpliría con mis expectativas o sería una decepción de proporciones catastróficas? Mi temor aumentaba con tanta campaña publicitaria, con cada corto que veía sentía que ya había visto la película al completo y que al final me llevaría un chasco. Las respuestas a mis preguntas las obtuve al  día siguiente del estreno.

         Asumo que todos conocen la historia, pero no está de más recordar que La Bella y la Bestia presenta a una protagonista aficionada a la lectura que sueña con aventuras y una vida más allá del pueblo en el que vive, luego de que su padre es hecho prisionero de la Bestia, ella lo salva y ocupa su lugar. Como mencionaba al principio, Bella es interpretada por Emma Watson, el resto del elenco está conformado por Dan Stevens (Bestia), Luke Evans (Gaston), Josh Gad (Lefou), Ewan McGregor (Lumière), Ian MacKellen (Din Don) y Emma Thompson (Señora Potts), entre otros. Todos están perfectamente caracterizados –en serio, si alguna vez me pregunté cómo se verían Gaston y Bestia (de este último específicamente en su forma humana) en la vida real, por fin tengo la respuesta–, tanto los humanos como el diseño de los personajes encantados, además de que sus interpretaciones son fantásticas y la gran dinámica entre ellos es un gran punto a su favor. Sin embargo, Emma Watson es la única cuya actuación resulta poco convincente, al menos al principio, donde luce acartonada y no consigue transmitir la esencia del personaje, afortunadamente conforme avanza la historia, Emma se va adueñando del papel. Por otra parte, un gran acierto de la película es que le dieron profundidad a los personajes al brindarles un pasado que redondea su carácter; en lo personal, me gustaron las incorporaciones que le hicieron al personaje de Bella que, pese a ser pequeños detalles, hablan de empoderamiento femenino.

         En cuanto a las canciones, están todas las que aparecieron en la versión original, pero también se crearon nuevas, como lo son “Evermore” o “Days in the Sun”, mi favorita es “How Does a Moment Last Forever” interpretada por Céline Dion, la cual no me sorprendería que figurara entre las nominadas a mejor canción original en la siguiente tanda de premios. Ahora bien, les cuento que yo vi la película en español –sacrifiqué el idioma original por verla en IMAX 3D, lo cual valió la pena visualmente– y el doblaje no me satisfizo del todo; por otro lado, desde que el soundtrack estuvo disponible en YouTube no he dejado de escucharlo y me parece increíble, si bien es cierto que la voz de Emma Watson palidece a lado del vozarrón que tienen sus coestrellas.   

Los números musicales, por su parte, me gustaron, particularmente me sorprendió que “Gaston” fuera mi favorito, en tanto que las canciones que más esperaba (“Belle” y la que le sigue –después de que rechaza a Gaston–) me parecieron absolutamente decepcionantes, más que nada por la actuación de Emma, yo esperaba un poco más de emoción en la parte cuando sube a la colina y proclama que quiere más que una vida provincial; paradójicamente, fue con ésta con la que comencé a llorar, sí, mi parte sensible pudo conmigo y casi me la pasé llorando toda la película, don’t judge me!  

         Visualmente es espectacular, desde el vestuario hasta los espacios están bien cuidados y se nota que se preocuparon por los detalles más pequeños para hacer de la ambientación un elemento principal de la cinta. Los colores y el estilo son atractivos y transmiten la esencia del mundo del dieciochesco. Con respecto al vestuario, amé la mayoría de los vestidos que usa Bella, pero el de la boda es el único que no fue de mi agrado.

         Finalmente, la película cumplió con mis expectativas y las superó, si bien la participación de Emma Watson tuvo sus altibajos, no me imagino a nadie más como Bella, en cuanto a la fidelidad a la versión original que tanto me asustaba, no puedo negar que fue una buena decisión y que agradezco mucho los añadidos y pequeños cambios que le hicieron a la historia. La Bella y la Bestia es un clásico animado y ahora también lo será en live action.

Ficha técnica

Director: Bill Condon.

Guión: Bill Condon, Stephen Chbosky y Evan Spiliotopoulos.

Música: Alan Menken.

Elenco: Emma Watson, Dan Stevens, Luke Evans, Emma Thompson, Ian McKellen, entre otros.

País: Estados Unidos, Reino Unido.

Duración: 129 min.   

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¿Ustedes también eran fans de la película animada?

Gracias por leer <3