¡Hola! Hoy les traigo la reseña de un
libro (que, por cierto, tenía pendiente desde hace años) que los llevará a la
Alhambra de principios del siglo XIX, nada más y nada menos, que de la mano de
Washington Irving. ¿Están listos para iniciar el viaje?
Washington Irving (1783-1859) fue un
escritor y diplomático estadounidense mundialmente conocido por escribir La leyenda de Sleepy Hollow (1820),
relato de terror corto que forma parte de la colección The Sketch Book of Geoffrey Crayon (1819-1820), el cual publicó
bajo el pseudónimo de Geoffrey Crayon. Washington Irving viajaba
constantemente, uno de los lugares que más lo apasionaron fue España, en
especial, la Alhambra; su alma romántica encontró en este sitio todo cuanto
pudo desear.
“Camino por tierras encantadas y estoy
rodeado de recuerdos románticos.”
En Cuentos de la Alhambra (1832) el autor narra su viaje de Sevilla a
Granada, su entrada en la mítica Alhambra y su estancia allí. Washington Irving
era un hispanista de corazón, a lo largo de esta obra se percibe el amor que
siente por la tierra española, por su historia y sus habitantes. Otro rasgo a
destacar de su persona es su espíritu romántico; el romanticismo se respira en
cada página: el retorno al pasado, la fijación por las ruinas y las leyendas
moras, y la estrecha relación entre el entorno natural y el individuo.
En esta obra el autor
funge como guía turístico, al mismo tiempo que describe su recorrido, introduce
pasajes históricos o algún dato curioso que pueda hacer más ameno al lector el
camino hacia Granada. Una vez que llega a la Alhambra, hace un plano general y
posteriormente irá presentando más a detalle lugares como El patio de los
Leones, el Generalife o La torre de las Infantas. Washington Irving tiene la
fortuna de establecerse en los aposentos del palacio, por lo que profundiza en
los recovecos de la Alhambra; él está emocionado de vivir allí, muchas veces se
imagina como un rey que tiene la libertad de descubrir los secretos más ocultos
de su fortaleza.
Durante su estadía en
el palacio, Washington lleva un diario en el que habla sobre su vida con las
gentes del lugar (la tía Antonia, Dolores, Mateo Jiménez –“el hijo de la
Alhambra”, guía personal de Washington–, entre otros), su día a día se compone
de su convivencia con los habitantes y de sus exploraciones por los sitios
emblemáticos. Washington Irving se enfrasca en mostrarle al lector los
distintos sitios que hay en la Alhambra, pero no sólo los describe, sino que
también intercala algún hecho histórico sobre los reyes moros (especialmente
siente una fascinación por el último monarca moro: Boabdil) o alguna leyenda
que le hayan contado, las cuales tienden a tratar sobre tesoros árabes
enterrados, caballeros musulmanes encantados o historias de amor entre personas
de distintas religiones. Entre las leyendas que menciona están la “Leyenda del
astrólogo árabe”, la “Leyenda del príncipe Ahmed al Kamel, o el Peregrino del
Amor” y “La leyenda de las dos estatuas discretas”.
Entre otras cosas, Washington
Irving a lo largo del libro está consciente del receptor de su obra, sabe que
va acompañado y no duda en romper la barrera del papel y dirigirse directamente
al lector: “¡Te has asustado! No es más que un halcón al que hemos espantado de
su nido”, “—¡Más no vayáis tan de
prisa!-oigo exclamar al lector—. ¡Esto es saltar al
final de una linda historia con demasiada velocidad!”.
“Eso es la Alhambra: una mole musulmana en medio de un país
cristiano; un palacio oriental entre los edificios góticos del Occidente; un
recuerdo elegante de un pueblo valeroso, inteligente y gallardo, que conquistó,
gobernó, floreció y desapareció.”
Ahora bien, en Cuentos de la Alhambra hay muchas
descripciones y un tono poético que permea de principio a fin. La Alhambra es
el personaje principal y, como tal, está bien delineado, el lector es participe
del legado cultural de este lugar. Así como Marco Polo mostró el mundo de
Oriente a los occidentales, Washington Irving revela la Alhambra a aquellos que
no han pisado tierras granadinas. Y no sólo eso, ya que también Cuentos de la Alhambra puede ser una
útil guía de forasteros (un género muy popular en ese siglo), ya que advierte a
los viajeros acerca de los contrabandistas y ladrones, además de que los
aconseja sobre qué medidas tomar; cabe mencionar que él parecía muy emocionado
por ser asaltado a mitad de camino y así poder vivir una aventura como las de
los romances.
El libro que yo tengo
es pequeñito y la tipografía parece atentar contra la vista, pero se compensa
con que se trata de una edición íntegra de la obra, ya que el editor explica
que Washington Irving publicó su obra con ciertas características, entre las
cuales se encuentra una dedicatoria, sin embargo, luego reelaboró Cuentos de la Alhambra y modificó,
complementó y omitió pasajes en relación con la primera, el editor procuró
incluir todo, sin dejarse nada en el tintero (además hace la anotación de que
muchas de las ediciones que circulan no están completas). Por otra parte, el
editor hace las acotaciones pertinentes en las notas a pie de página, además de
que pone con cursiva las palabras que en el texto original estaban en español
(Washington Irving hablaba bien el idioma). Me falta decir que el libro también
está lleno de dibujos de la Alhambra, aunque la mayoría no se ven tan definidos.
Ya para concluir, Cuentos de la Alhambra es una obra muy
descriptiva en la que el autor imprime un tono poético y romántico, al mismo
tiempo que presenta la Alhambra, hace un retrato del carácter español,
introduce datos históricos y leyendas que complementan la caracterización de
uno de los lugares más emblemáticos de España. Me gustó mucho visitar la
Alhambra del XIX en compañía de tan simpático y soñador guía, si antes ya tenía
ganas de ir a España, ahora tengo muchísimas más.
FICHA: IRVING,
Washington, Cuentos de la Alhambra,
traducción, prólogo y notas de José Méndez Herrera, México: Aguilar, 1976, pp.
471.
¿Hay aquí alguien de
España? ¿Han estado en la Alhambra? O, como yo, ¿viven en otro país? Díganme en
los comentarios si les llama la atención este libro o si ya lo han leído. :D
Gracias por leer <3
¡Que obra más interesante!<3
ResponderEliminarEspero poder darle la oportunidad algún día.
Y si, yo vivo en España. Pero, no he tenido la ocasión de ir.
Si se la das espero la disfrutes mucho :) Ojalá algún día tengas la oportunidad de ir, jeje yo estoy del otro lado del charco y veo más difícil ir algún día :P
EliminarUn abrazo.
España es un lugar precioso :D
EliminarEspero que ese sueño tuyo se haga realidad. Mi mamá soñaba con vivir aqui y mira aqui estamos!
Eso me anima mucho :D
Eliminarla verdad es que esta temática de libros no me llama nada, pienso que la acabaría abandonando en cualquier lado jaja
ResponderEliminarSuele pasar xD
EliminarUn abrazo :)
¡Hola!
ResponderEliminarGracias por una reseña tan completa :)
Tengo este libro en mi estantería esperando a que lo lea... ¡con lo finito que es!
Yo soy de España y he estado en la Alhambra y la verdad es que es de lo más espectacular que puedes ver. Cada parte está repleta de historia y secretos... Es abrumador, y su belleza, sobre todo iluminada por la noche :)
¡Nos leemos!
¡Qué hermoso! Yo nada más de imaginarla ya me siento como si fuera un lugar mágico, y por lo que leo la experiencia en vivo es más impresionante aún. Ojalá pronto leas esta obra y la quites de tus pendientes :)
Eliminar¡Un abrazo!
Hola.
ResponderEliminarSoy de Granada así que imagina las ganas que tengo de hace años de poder leer este libro, estar en el sitio donde lo escribió fue algo que me hizo hacerme con el libro, me parece maravilloso.
Muchos besos, nos leemos.
Qué fortuna que vivas por allá :)
EliminarUn abrazo.
Qué reseña tan elaborada, me ha encantado. Creo que eres la primera persona que veo que en una reseña pone abajo del todo el libro citado. Eso está genial.
ResponderEliminarAdoro la Alhambra como buena granaina y no conocía este libro -qué pecado por mi parte-.
Voy a intentar hacerme con él, porque me has despertado el gusanillo de leerlo.
¡Nos leemos! ~
¡Hola! Qué bueno que te gustó la reseña :) Ojalá puedas conseguir una copia de la obra en un futuro próximo, cuando la leas no olvides contarme qué te pareció.
EliminarUn abrazo :)