Reseña: La segunda oportunidad, C. Virgil Gheorghiu

“¿Cómo quiere usted que pueda hablar? Y lo más terrible es ignorar por qué fui condenada, o por quién. ¿Cómo es posible semejante cosa en un siglo que se dice civilizado? Nadie puede ayudarme y esto es dramático. Nadie, ningún hombre puede ayudarme. Ningún gobierno, ningún país puede acudir a socorrerme. Sin embargo, cuento con numerosas relaciones y a pesar de ello, nadie puede hacer nada por  mí.” La segunda oportunidad, C. V. G.  

Esta cita resume muy bien el contenido de la novela que les reseño en esta ocasión. Este libro me lo recomendaron desde octubre del año pasado, pero apenas pude leerlo. Comencemos.

 La segunda oportunidad (Le seconde chance, 1952) del escritor rumano (autoexiliado en Francia en 1948) C. Virgil Gheorghiu (1916-1992), comienza presentándonos a Boris Bodnar y a Pierre Pillat, ambos estudian en un colegio militar rumano, el primero ha sido expulsado y el segundo le aconseja que regrese a su casa. Boris no quiere volver con su familia porque cuando tenía tres años le reventó el ojo a su hermano pequeño, debido a eso su familia lo trata como a un criminal. Boris le comunica a su amigo que está decidido a irse a Rusia, éste  trata de disuadirlo, pero no lo consigue. Mientras platican, Pierre saca un cigarrillo y en la caja hay una foto de una chica hermosa, se trata de Eddy Thall, él está enamorado de ella aunque nunca han cruzado una palabra; Boris queda fascinado y le pide la foto, Pierre acepta, sin embargo, en el viaje a Rusia el retrato se estropearía, por lo que Pierre conserva la foto y Boris el nombre. Tras este pasaje la historia da comienzo, muchos años después Pierre tiene un puesto alto en el gobierno rumano, Boris se ha establecido en Rusia y goza de un buen cargo y Eddy es una artista judía muy exitosa, pero el comienzo de la Segunda Guerra Mundial desencadenará una serie de eventos en la vida de los personajes que pondrá a prueba su fortaleza ante las adversidades.

La historia tiene muchos personajes aparentemente separados, pero que están relacionados entre sí; la guerra y su desenlace fungirá como lazo de unión entre personas de distintas clases sociales y nacionalidades que ahora se encuentran en las mismas circunstancias. Boris, Pierre y Eddy son el hilo conductor de esta historia, especialmente los dos primeros. El narrador es omnisciente, por lo que el lector es testigo de todo lo que sucede y tiene un panorama completo de los acontecimientos y de los pensamientos de los personajes, así como una diversidad de opiniones sobre un mismo tema.

Aunque la novela está ambientada en la Segunda Guerra Mundial, se centra más en la conclusión de ésta y en el lapso posterior a la entrada de los estadounidenses y los rusos en Europa, así como la repartición de territorios entre ambas potencias y las consecuencias que trajo a los europeos, quienes tras ser liberados por los aliados fueron sometidos a nuevos regímenes que poco o nada comprendían su situación. Gheorghiu muestra un panorama general de la guerra y de los países que participaron, pero se enfoca más en los soviéticos, después de todo, Boris emigra a Rusia y se vuelve una leyenda del partido comunista. Los comunistas son presentados como el terror que asola el continente, el cual debe ser detenido.

La segunda oportunidad expone la decadencia del hombre, cada parte que conforma la novela presenta la degradación de las personas, incluso en el momento de la victoria hay pérdida, dolor y humillación. La mala suerte abunda en sus páginas, la aterradora imagen de la rueda de la fortuna se cierne sobre las cabezas de los personajes, siempre a la espera de lo peor, aún cuando piensas que nada podría empeorar ya; resulta terrible cómo en el momento en que crees que las cosas cambiaran, que la esperanza en un futuro mejor es posible, algo viene a trastocar todo.

El autor hace énfasis en la crueldad y la indiferencia de las llamadas “naciones civilizadas”, los alemanes, los soviéticos, los estadounidenses, los australianos, etc., todas tienen su propia opinión sobre cómo se deben llevar las cosas a cabo, pero en el fondo su deseo es el mismo; varias de las ideas expresadas sobre la selección humana en pro de la creación de una raza superior son odiosas. Lo que aparece en las distopías se queda corto comparado con lo expuesto aquí.

Los personajes experimentan un descenso a los infiernos y recorren un camino que sólo les presenta miseria y desolación. Paulatinamente son despojados de sus cosas, de su casa y de su patria, poco a poco su espíritu se deteriora y van perdiendo su identidad. El autor muestra el dolor que genera separarse de los seres amados y tener que vivir en el exilio. La segunda oportunidad está en el occidente, pero es una oportunidad que parece inalcanzable. La burocracia es el peor enemigo que tiene el hombre que ya no tiene nada.

Es una novela con la que sufrí mucho, me daba tristeza y furia cada parte que leía, es increíble el grado de crueldad e indiferencia con la que el ser humano trata a su prójimo. Detesté a Boris, su personalidad es resultado de sus padecimientos tempranos, pero eso no quita que lo odiara mucho. La segunda oportunidad es una obra triste, si han visto películas ambientadas en este momento histórico sabrán a lo que me refiero. La novela tiene buen ritmo y la forma en que está escrita es de un estilo muy cinematográfico, estoy segura de que se podría hacer una buena adaptación; si algún día llegan a hacerla, estoy segura que lloraría con cada escena. Es un libro que les recomiendo, pero léanlo con paciencia.  

FICHA: GHEORGHIU, C. Virgil, La segunda oportunidad, traducción de Hellen Ferro, Buenos Aires, Argentina: Emecé Editores, 1953, pp. 411 (Colección Grandes Novelistas)

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