¡Hola,
mis queridos lectores!
¿Cómo
están? ¿Qué tal les va? Yo aquí disfrutando un poco de las vacaciones, así que
me hice de un ratito para escribir esta reseña de un libro al que le traía
muchas ganas pero que no fue lo que esperaba.
Creo en una cosa llamada amor
(I Believe in a Thing Called Love, 2015), de Maurene
Goo, es una novela juvenil que nos presenta una historia de amor en
la que cada momento está determinado por los dramas coreanos. Desi Lee es una
adolescente que es buena en todo, menos en el amor, así que cada que le gusta
un chico y se acerca a él, algo bochornoso o humillante sucede. Esto cambia
cuando Desi, quien no eran fan de los dramas coreanos a diferencia de su padre,
ve un drama completo y queda maravillada con lo que encontró: una receta
infalible para triunfar en el amor. Una guía paso a paso que le demostraba que aquellas
anécdotas vergonzosas por las que había atravesado, en realidad tenían potencial
para ser el inicio de un romance colosal. Ahora es su oportunidad de poner en práctica
dicha guía con su nuevo interés amoroso, Luca, con quien no había tenido el
mejor comienzo, ¿funcionará? Desi está completamente segura de que sí.
«Creí, y aún sigo creyendo, que puedes construir tus sueños, ladrillo por ladrillo. Que puedes lograr lo que sea con perseverancia.
Incluso enamorarte.»
Quisiera hablar primero de lo que me
gustó: el análisis minucioso que se hace de los dramas coreanos, considerando
su estructura, la trama y los personajes, cuáles son los tópicos y los
elementos básicos que todo drama, en el que el romance sea esencial, debe de
incluir. Hay una detallada observación a cómo es el desarrollo de la relación
amorosa, cómo es que de tener cero esperanzas con alguien al final terminan
juntos y felices. Además, se agrega una lista de recomendaciones para
principiantes, perfecto para todos aquellos que quieran adentrarse en este
mundo y que no saben por dónde empezar, incluso está dividido por géneros y
temas o motivos específicos, lo cual resulta un extra completo y conciso.
Ahora toca hablar de lo que no me gustó:
la protagonista. Desi hace su receta para enamorar a Luca a partir de su exhaustivo
estudio de los dramas coreanos, los pasos pueden parecer inofensivos y hasta
inocentes, pero conforme Desi los ejecuta ya no lo son tanto, más cuando las
consecuencias de algunos de ellos suelen ser negativas y ella continúa como si
nada. Si bien tiene un grado de conciencia de que lo que está haciendo puede
parecer malo –porque, efectivamente, es malo– o que sus propios amigos se lo hacen
notar, prefiere ignorarlo y prosigue con la receta, incluso cuando esta resulta
innecesaria o cuando Luca por fin le corresponde, ella se empeña en llevarla a
cabo al pie de la letra hasta el ansiado desenlace. Desi nunca se detiene, ni
siquiera cuando se da cuenta, ahora sí, de que lo que hizo y sigue haciendo
está mal.
«Lo miré, y aunque generalmente no sientes cuando tus ojos brillan, sentí que mis ojos brillaban. Siempre había dado por sentado que cuando las relaciones no iban bien, ese era el final. Pero la totalidad de la premisa de los dramas coreanos era la de y siempre terminan felices. Y si mirabas con más atención, había una receta para hacer que un chico se enamorara de ti. Una que comenzaba con una dosis pesada de humillación para la chica. Entonces, ¿por qué todos mis coqueteos fallidos y humillaciones habían quedado en la nada? Fue porque nunca había tenido un plan. Nunca había ningún paso a seguir.»
Aparte, ella intenta ser alguien que no es
por gustarle a un chico, lo cual ya deberíamos saber que no es bueno, pero,
dejando eso de lado, quiero enfocarme en sus amigos. Fiona y Wes son los
mejores amigos de Desi, a ellos se les describe como buenos amigos y que son
unos rompecorazones. Esto último es lo que quiero destacar, que ambos no están
caracterizados como las mejores parejas del mundo porque no tratan bien a las
personas con las que están, y son ellos mismos los que se percatan de que Desi
está pasando ciertos límites que no debería, y se lo hacen advierten. En cierto
momento, por ejemplo, Wes cuestiona a Desi y ella responde: «–¿Sabes
qué, Wes? Eso es basura sexista. Cuando ustedes, los chicos, atraviesan
obstáculos para conseguir a una chica, se lo considera romántico. Piensa sobre
trepar la ventana de una chica, sin previo aviso, para verla dormir. Sin embargo,
cuando una chica es la que hace esos gestos dramáticos por un chico, es espeluznante.
¡Basura de doble moral!», lo que señala la protagonista es verdad, hay una
doble moral y es justo criticar esa diferencia de género que se hace ante
ciertas actitudes que son aceptadas para los hombres, pero no para las mujeres;
no obstante, lo cierto es que se trata de acciones que en ambos géneros son
inaceptables. El punto es que Desi siempre encuentra una razón para justificar
su proceder en pos del amor, porque el que persevera alcanza. Como nota aparte,
tal como se puede apreciar en esa cita, a lo largo del libro hay muchas
referencias a Crepúsculo.
Tal vez todo lo que mencioné hasta ahora no me hubiera molestado tanto de no ser por el desenlace. Lo siento, pero a partir de aquí habrá spoilers sobre el final. No me gustó que, a pesar de que Desi sabe que lo que hizo está mal, volviera a cometer el mismo error y que, para colmo, Luca ya enterado de todo y enfadado por la situación, le perdone todo a la protagonista y se quede con ella. Me habría gustado que la autora en vez de recompensar a la protagonista, lo acontecido lo hubiera aprovechado para hacer una crítica o para el aprendizaje y crecimiento del personaje. Hubiera preferido un desenlace así y, de haberlo obtenido, quizá la novela me habría sorprendido y gustado.
Ya para terminar, Creo en una cosa llamada amor era un libro en el que esperaba encontrar una historia de amor bonita, tierna y divertida, en cambio, halle una novela que, si bien estuvo entretenida y se lee rápido, no me hizo pasar un buen rato por las razones que ya he mencionado. Considero que la idea era buena, pero pudo haberse ejecutado mejor.
FICHA:
GOO, Maurene, Creo en una cosa llamada amor, traducción de Ana María
Perez, Ciudad de México: VRYA, 2019, pp. 341.
¿Les gustan los dramas coreanos?
Gracias por leer. <3
No hay comentarios:
Publicar un comentario