Reseña: Compañías silenciosas, de Laura Purcell

¡Holaaaaaa! ¿Cómo están? ¿Qué tal va su semana? ¿Se acuerdan de que el año pasado estaba haciendo un especial de miedo por lo de Noche de Brujas y Día de muertos en el que todas mis publicaciones tenían que ver con eso? –ay, pero ¡qué pregunta tan larga me quedó! >-<–. Pues bien, una reseña que me quedó pendiente de preguntar es la que les traigo el día de hoy, como siempre, todo llega con retraso a este blog, ustedes disculparan je, je. ¡A leer!

“No puedes explicar el miedo; sólo puedes sentirlo, rugiendo

a través del silencio y paralizando de un golpe tu corazón.”

Fragmento de Compañías silenciosas, de L. P.

En Compañías silenciosas (The Silent Companions, 2017), Laura Purcell nos presenta una historia de miedo ambientada en el siglo XIX en una mansión llamada The Bridge, la cual ha sido heredada por una joven viuda, Elsie Bainbridge, cuyo esposo acaba de fallecer en raras condiciones al poco de que se casaran y que la ha dejado sola en esa casa semiabandonada con la única compañía de los sirvientes y de su cuñada Sarah. Esta es la premisa de la novela, pero cabe mencionar que Elsie se encuentra recluida en el Hospital St. Joseph’s y que ha sido acusada de asesinato, por alguna razón ha perdido el habla y han pasado meses desde que llegó allí y de que se incendiara The Bridge. El Doctor Shepherd es asignado al caso de Elsie y él debe decidir si ella padece alguna enfermedad mental o no, dependiendo de su diagnóstico, ella podría ir o no a la cárcel por los cargos que se le imputan. El doctor le sugiere a Elsie que cuente lo que pasó para que él pueda ayudarla –aunque lo que él realmente busca es su propio beneficio–, pero como no puede hablar, la insta a escribir lo ocurrido, todo lo que ella pueda recordar.

         Y es así como Elsie comienza a escribir qué fue lo que pasó en The Bridge, comienza su relato en el momento justo de su traslado a la mansión tras la muerte de su marido, cómo se sentía ajena a todo, la incómoda convivencia con su cuñada y con los sirvientes, así como el descubrimiento de una habitación secreta que alberga en su interior unas figuras de madera planas que tienen pintadas a personas con posturas de la vida cotidiana. Estas antigüedades se conocen como “compañías silenciosas” y son aterradoras, poco a poco su presencia irá perturbando la vida de los habitantes de The Bridge, quienes no pueden evitar escuchar ruidos o sentir que las figuras los siguen con la mirada.

         El relato de Elsie es en tercera persona, como si ella fuera una espectadora de su propio pasado, como si de esa forma pudiera mantener una distancia con lo que vivió, su narración se intercala con lo que le va sucediendo en el presente y después se introducen pasajes del diario de un antepasado de su marido que habla sobre la adquisición de las compañías silenciosas. Esta manera de estructurar la obra me parece un gran acierto, ya que genera curiosidad e intriga por saber qué fue lo que pasó, descubrir por qué Elsie está en el manicomio y si hay que confiar en sus escritos o no.

         Al principio Elsie no me agradaba, debido a que se presentaba como un personaje antipático, pero conforme avanza la lectura se muestra como una mujer pragmática, leal, aguerrida y valiente. El hecho de que esté caracterizada de esa forma y que ella misma esté contando todo, predispone al lector a que se desconfié de ella en un inicio, pero también esta característica le confiere un toque de veracidad a lo que cuenta.

Ahora sí, en cuanto a lo que cuenta sobre esos acompañantes, debo decir que cumplió su cometido conmigo, me dio mucho miedo lo que sucede en el libro. Que yo soy muy miedosa de por sí, todo sea dicho, pero en esta ocasión creo que uno de los grandes aciertos de la narración es que le da mucho énfasis a la ambientación y a lo sensorial. Una mansión alejada, muertes, una atmósfera lúgubre, el temor del pueblo por The Bridge, unas figuras aterradoras y misteriosas, por un lado, y susurros, ruidos, sentir que te siguen con la mirada y el efecto que eso produce en tu cuerpo, por otro. Creo que eso fue lo que me fascino de la novela, la manera que tiene la autora para transmitirte lo que sienten los personajes, cómo los invade el miedo y la desesperación.

         La lectura me pareció adictiva, no podía dejar de leer y lo leí en un solo día. Necesitaba respuesta, quería saber qué había pasado, si realmente Elsie era la culpable o no, y vaya que quedé complacida con el final. Si bien Compañías silenciosas presenta elementos similares a los que se pueden encontrar en otras historias (mansión aislada, objetos aparentemente embrujados, protagonista a la que no le creen lo que ve), la autora maneja muy bien la intriga gracias a su estructura y a la elección de los narradores, además juega con la tensión dramática y opta por darle un peso a los sentidos para infundir miedo, lo cual hace de esta una novela entretenida que no podrán parar de leer. Como nota aparte, me gustaría que hicieran una adaptación cinematográfica de la novela, pero algo me dice que se perdería mucho de lo que me gustó.

FICHA: PURCELL, Laura, Compañías silenciosas, traducción de Gabriela Fabrycant, España: DNX, 2018, pp. 317.

¿Ya lo leyeron? ¿Les llama la atención?

¿Qué libro de terror me recomiendan?

Gracias por leer <3