¡Hola a todos! Como ya es costumbre, me
he vuelto a atrasar con las reseñas, espero ponerme al corriente esta semana :P
Antes de comenzar con la reseña, dejen
que les cuente mi
historia con Charles Dickens. Cuando entré a la universidad, durante
mi primer semestre de la carrera, nos dejaron hacer un trabajo de investigación
sobre algún autor y mi equipo se decantó por Dickens, cada integrante tenía que
elegir un tema o un aspecto en la obra de dicho escritor y desarrollarlo en
algunos de sus cuentos. Yo escogí el tema del amor. Aparte de leer sobre dicho
tema, también leí muchos cuentos de Dickens y montones de textos sobre él,
entre biografías y crítica literaria. Nunca antes había leído tanto de un autor
y mucho menos acerca él, me saturé, para cuando terminé de escribir el trabajo
no quería saber nada de Dickens, si antes me había gustado, ahora ya no lo
quería ver ni en pintura. Con mi dosis “dickeniana” de aquí a la eternidad, ya
no me apetecía leer algo más de él, con todo y que varias de sus novelas me
llamaban la atención.
Cuando leí la trilogía
de The
Infernal Devices (TID) de Cassandra Clare, mi interés por Dickens
resucitó; si ya leyeron los libros, sabrán que Historia de dos ciudades es una novela relevante para los
personajes de Will y Tessa. La segunda vez que leí TID me propuse leer Historia de dos ciudades, pero entre una
lectura y otra mi propósito decayó y no lo hice, a pesar de que el libro estaba
en mi estantería esperando desde que tengo memoria. Hace poco hice una tercera
relectura de TID y en esta ocasión me determiné a leer de una vez por todas Historia de dos ciudades. Lo conseguí.
Me costó entrar en la
historia, la primera parte (que es cortita) tardé en leerla, pero después todo fue
pan comido, los capítulos fluían como el agua. Pero, oh, sorpresa, la edición
que había estado esperando toda una vida en mi estantería para ser leída,
resultó que estaba incompleta. Quien elaboró la versión que tengo decidió que
era buena idea extirpar algunos capítulos de la segunda parte de una manera tan
habilidosa para que no sospecharas que allí faltaba algo, pero yo me di cuenta
y me enojé mucho. Tuve que recurrir a un pdf para leer aquellas partes que
faltaban en mi edición.
Bueno, ahora sí, tras
un largo prefacio, comienza mi reseña de Historia
de dos ciudades de Charles Dickens.
Historia de dos ciudades (A Tale of Two Cities, 1859) del escritor inglés Charles Dickens
(1812-1870) es una novela histórica que se desarrolla en Francia y en Inglaterra
durante el siglo XVIII, específicamente en la época de la Revolución francesa.
Años antes de la toma de la Bastilla, la señorita Lucie Manette acompañada por
el abogado Lorry, van a Francia a recoger a su padre, quien estuvo preso varios
años por un crimen que no cometió. De regreso a Inglaterra, Lucie y su padre
serán inseparables, siendo ella el sostén que lo mantiene cuerdo.
Posteriormente, ellos se verán involucrados en un juicio en el que el joven
Charles Darnay es acusado de traición, pero gracias a la intervención de Sydney
Carton, es absuelto. Tras este suceso las visitas de estos hombres a la casa de
la señorita Manette serán frecuentes. Mientras tanto, en Francia comienza a
gestarse la Revolución que acabará con el privilegio de la monarquía y de los
nobles. ¿Qué relación hay entre la Revolución francesa y estos personajes que
viven en Inglaterra?
Historia
de dos ciudades está dividida
en tres partes que tratan la reunión de Lucie con su padre, las
relaciones entre los personajes y el momento de las revelaciones,
respectivamente. Dickens es el narrador
omnisciente que desde el siglo XIX echa la vista atrás para contar
una historia acontecida en el siglo anterior en uno de los momentos más
importantes de la historia francesa, a lo largo de
la obra se hacen menciones de esa distancia temporal entre el narrador y lo que cuenta. El narrador comienza la novela haciendo un esbozo del
siglo XVIII, estableciendo así la importancia que tendrán las circunstancias
históricas en la vida de aquellos que caminan por estas páginas.
En cuanto a los personajes, estos tienen
un pasado oculto que introduce un elemento de misterio en la trama y que
determina lo que va a suceder, además de que los dota de un aire romántico que se acentúa con el elemento
profético que permea la obra. Desde el inicio de Historia de dos ciudades, cuando se hace
mención de la creación de cierto artefacto que será la sensación del XVIII, el
lector sabe que la fatalidad caerá en algún momento sobre los personajes, sin
contar con que hay escenas que anticipan el desenlace y reafirman los avisos de
un destino inevitable.
Si hay un personaje que
brilla por encima del resto es el de Sydney Carton.
Los galanes arrogantes y con una lengua mordaz no
son nada nuevo: Sydney es apuesto, cínico, licencioso, consciente de
que no puede mejorar su condición y que es sincero con sus sentimientos. Las
sombras que acechan la tempestad están muy relacionadas con este personaje,
para quien el futuro representa una oportunidad de redención y de permanencia.
El retrato de las
pasiones humanas desfila capítulo a capítulo, el odio y el amor son los
principales móviles de los personajes, tanto a nivel particular como general.
La Revolución muestra la ferocidad y el deseo de venganza que siente el pueblo
francés, su sed de sangre no cesa y pronto la justicia se vuelve crueldad. Por
otra parte, Lucie y su padre, así como el Señor Lorry, Charles y Sydney,
demuestran lo que puede hacer una persona que ama.
Por otro lado, una característica a destacar en la novela es el
estilo de Dickens, quien narra y describe con tal habilidad que
envuelve al lector y lo hace presenciar con claridad lo que se está contando.
Una escena tan cotidiana como un juicio, por ejemplo, pasa a ser un espectáculo
en el que las personas y sus murmullos son el zumbido de moscas que esperan un
cadáver por el cual revolotear.
Finalmente, Historia de dos ciudades es una novela histórica
cuyos personajes están bien definidos y cuyo destino está determinado tanto por
su carácter como por las circunstancias históricas. Se
trata de una novela que disfruté mucho y que me encantó, sobretodo el personaje
de Sydney. Aquí encontrarán una historia con misterio, secretos, odio,
venganza y amor, contados por la maravillosa pluma de Dickens quien deleita
página a página a su lector, ya sea el de hace más de un siglo o el de ahora.
FICHA:
DICKENS, Carlos, Historia de dos ciudades,
versión de Víctor Scholz y con ilustraciones de Fariñas, Barcelona: Editorial
Mateu, 1964, pp. 287 [Esta es la edición que yo tengo, la cual NO RECOMIENDO,
consíganse una que sí tenga el texto íntegro]
¿Les llama la atención?
¿Ya han leído esta obra o alguna otra de Dickens?
Espero hayan encontrado su próxima lectura ^^
Gracias por leer; los leo en los comentarios <3
Hola!
ResponderEliminarMe pasó lo mismo al leer TID, mi problema es que no soy muy amiga de los clásicos pero en un futuro espero poder leerlo igual que tu :)
Un abrazo y nos leemos
Yaiza xx
¡Hola, Yaiza!
EliminarEs que nada más leer la pasión con la que Tessa y Will hablaban de este libro... es inevitable no querer leerlo :P Aunque se trata de un clásico, yo siento que es cuestión de quitarle esa etiqueta y disfrutarlo como cualquier otro libro, además, si te gustó TID, seguramente le agarrarás cariño a la historia, especialmente a cierto personaje.
¡Abrazos!
Hola guapa!
ResponderEliminarUhhh! ya ni me acuerdo cuando leí este clásico, y lo cierto es que hace tiempo que los tengo olvidados, aunque tengo varios de ellos esperando en mi estantería. Besotes
¡Hola, Violeta!
EliminarJaja pues ya va siendo hora de que los saques de la estantería ;) No te apures, yo estoy igual, mi estantería está llena de clásicos que esperan a que los lea.
¡Abrazos!
Hola!
ResponderEliminarA mí no me llama mucho la atención, pero me alegro de que lo hayas disfrutado :D
Un beso!
Ya será para la otra ;)
Eliminar¡Abrazos!
Hola!
ResponderEliminarYo también he querido leer Historia de dos ciudades por TID, pero no he podido hacerme con el ejemplar. Anoto cual es la edición que tienes para no comprarlo xD
Ese personaje Sydney me da curiosidad, chico malo ñam, ñam jaja aunque lo curioso de Los orígenes es que yo prefiero a Jem antes que Will.
Besos!!
¡Hola, Viry!
EliminarJaja sí, revisa muy bien la edición que adquieras para que no te lleves una mala sorpresa.
Fíjate que a mí Will me cae bien, pero si alguien conquistó mi corazón, ese fue Jem <3
Un abrazo.
A mí me encantó casi todo en la novela, tal el lenguaje era algo difícil (inglés del siglo XIX) pero esa capacidad para resumir una situación con apenas unos trazos (los pobres bebiendo el vino que se escurre entre los adoquines, los hombres viajando embozados, tejer como una metáfora de las maquinaciones...). Me encantó, esa visión cercana de los pobres sin usarlos como punto de vista es algo que me maravilló.
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