Top 5: Adaptaciones que me gustan más que los libros

¡Hola a todos!

El día de hoy les quiero hablar de aquellas películas que me gustaron más que el libro del cual fueron adaptadas. Yo sé que prácticamente es ley la frase “el libro siempre es mejor que la película”, bueno, para mí no siempre es así, hay ocasiones en que las adaptaciones me gustan más, así que hoy les mostraré cinco películas que prefiero por encima de sus libros. ¿Listos?

1) Bajo la misma estrella. Mientras leía la novela de John Green no se me quitaba la idea de la cabeza de que la película estaría mejor y de que me iba a gustar más, página tras página me convencía de que la historia funcionaría mejor como un producto audiovisual y tendría un mayor impacto. Dicho y hecho, la película me gustó más y hasta me hizo llorar. Sobra decir que el soundtrack también influyó mucho en mí, ya que le proporcionó el ambiente justo a lo que se estaba desarrollando. No les voy a mentir, la historia en sí no me termina de convencer, pero me gusta más cómo se desenvuelve en la adaptación. Aquí entre nos, les confieso que mi personaje favorito es Peter Van Houten. ¡No me linchen por esto, por favor!

2) Las ventajas de ser invisible. En este caso el autor, Stephen Chbosky, estuvo involucrado en el proceso, así que supo adaptar muy bien su novela y hacer que funcionara espléndidamente en el cine. Lamentablemente, eso fue lo que hizo, a mi parecer, que el libro no me gustara tanto. Leí el libro después de ver el filme, pero la experiencia, desde luego, no fue la misma, en lo personal, me quedó a deber. En la película, las actuaciones, el ambiente y la música, así como el desarrollo de la historia, me provocaron una montaña rusa emocional, además de que la insinuación de cierto evento queda mejor. En fin, la novela me gustó, pero la película se lleva unos puntitos más.

3) Un gran chico. La película es de mis favoritas, así que esperaba que el libro fuera mejor cuando lo leí, pero me llevé una decepción total. Me gustó más cómo se desarrolló la historia en la adaptación, porque en la novela parece que esta no va a ningún lado; además de que las interpretaciones de Hugh Grant y Nicholas Hoult redondean más a los personajes, ya que en la versión impresa los siento un tanto planos.

4) En llamas. Las películas de Los juegos del hambre siempre me han gustado más que los libros, pero mi favorita es la segunda (con todo y que me quedó a deber la parte en la que se cuentan los juegos de Haymitch). Me agrada que en la película se tenga una visión más amplia de lo que sucede y no sólo sea la perspectiva de Katniss (que dicho sea de paso, no la soporto y al menos en la película su actitud se me hace más pasable), ya que ella no profundiza realmente en lo que está pasando. Siendo que Katniss es la voz cantante en las novelas, hubiera preferido que al menos su personaje fuera más inquisitivo y reflexionara un poco más sobre lo que está sucediendo. Considero que en la trilogía habría ayudado que se introdujera la perspectiva de otros personajes o un narrador omnisciente, puesto que esto permitiría una crítica más profunda sobre los temas que plantea Suzanne Collins.  

5) Mary Poppins. He de mencionar que no es de mis películas favoritas, me gusta una que otra canción, pero dura muchísimo y eso le resta puntos desde mi perspectiva; sin embargo, me gusta más que el libro. Cuando leí la novela (hay varias, sólo leí la primera) me sorprendí al ver que la Mary Poppins de P. L. Travers era completamente opuesta a la de Disney (en el libro es arrogante, prepotente y presumida –multiplicado por diez–), sin duda la casa del ratón la edulcoró un montón, aparte de que son dos historias muy diferentes. El libro está bien, no lo niego, pero prefiero la adaptación. Quizá si hubiera leído el libro primero pensaría diferente; nunca lo sabremos.

         Por cierto, les sugiero (y recomiendo ampliamente) que vean la película Saving Mr. Banks, la cual trata sobre la pelea entre la autora y Walt Disney para llevar a la pantalla grande la historia de la niñera más famosa del mundo. Aunque la película se toma varias libertades sobre lo que cuenta, vale mucho la pena, a mí me encanta. La situación que presenta les recordará lo que seguramente tienen que sufrir los autores cuando venden los derechos de sus obras y las decepciones que se llevan los fans cuando lo que ven en el cine no es ni remotamente parecido a lo que leyeron o imaginaron. Así que cada que vayan a ver la adaptación en turno de su libro favorito, recuerden lo que le pasó a la señora Travers con su Mary Poppins (hasta se cuenta que lloró de la rabia por lo que hicieron con su amado personaje), que no están solos con su dolor y que es algo que sucede desde siempre.  

Mención honorífica: Diarios de vampiros. Esta no es película, pero bueno… La incluyo porque sigo la serie desde que inicio, me encanta y aunque ya se ha vuelto repetitiva, me sigue enganchando, cosa que no han logrado otras series (cof cof Once Upon A Time cof). Pasada la primera temporada compré los libros, los leí y morí de la decepción. Nada que ver una cosa con la otra, o sea, en líneas generales todo se conserva igual, pero el enfoque que le dieron en la serie, la definición de los personajes y los giros argumentales que introdujeron hacen que sea una historia más atractiva que la que se presenta en las novelas de L. J. Smith, con decirles que ya ni siquiera seguí comprando los libros que se centran en el personaje de Damon.

Estas son las películas que me gustan más que sus libros, también hay adaptaciones que nada que ver con el libro, que ambos son productos totalmente diferentes y que aún así, los dos me terminan gustando; si quieren, luego les traigo un top con esas películas que tergiversan todo y que de todas formas disfruto.

Aquí se acaba el post de hoy. ¿Qué opinan? ¿Son de los que “el libro siempre es mejor” o hay veces en que la película les gusta un poquito más?  No olviden dejarme sus comentarios, siempre disfruto leyéndolos.

Gracias por leer <3