Reseña: Te daría el sol, Jandy Nelson

¡Hola, queridos lectores! ¿Cómo están? Yo quiero decirles que sigo viva, que no me he olvidado del blog y que tan pronto tenga la oportunidad me pondré al corriente con las reseñas pendientes y respondiendo comentarios. Rápidamente les cuento que febrero fue un mes lleno de trabajo y que, para colmo, mi lap anda fallando, no sé qué le pasa, tengo internet, pero no me carga las páginas, reinicio, se soluciona el problema por espacio de media hora y luego vuelve a fallar, es desesperante. Pero bueno, por el momento los dejo con una nueva reseña. ¡Comencemos!

Te daría el sol (I’ll Give You the Sun, 2014) de Jandy Nelson nos cuenta la historia de Noah y Jude, unos mellizos inseparables en un inicio y, posteriormente, unos desconocidos que apenas y se hablan. La novela está contada por los dos personajes, mientras que Noah narra lo ocurrido cuando tienen 13 años de edad, Jude se encarga de la perspectiva del presente en la que ya son unos adolescentes de 16 años. Ambos puntos de vista se intercalan y van construyendo la intriga, de tal manera que la duda está en qué fue lo que sucedió para que llegaran a la situación en la que se encuentran en la actualidad.

         Noah y Jude tienen unas voces bien diferenciadas que se relacionan con su manera de ver e interpretar el mundo. El museo invisible e Historia de la suerte son los títulos de las partes de Noah y Jude, respectivamente. Todo lo que le sucede a Noah, todo lo que siente, lo que ve, lo que experimenta y demás, lo convierte en arte en su mente, él crea obras que puede o no plasmar en una superficie física, pero que demuestran la sensibilidad de su alma y su estrecha relación con la pintura. Jude, en cambio, toda su realidad la pasa a través del filtro de la superstición, cualquier cosa por superflua que sea, tiene su explicación en algo cósmico o mágico, esta forma de interpretar el mundo es la única manera que Jude tiene de controlar su vida.

«La tierra tiembla ante esa frase. Sabía que iba a acudir incluso antes de salir de casa. Lo sabía. Y yo también. Ambos lo sabíamos.

(Autorretrato: ¡Yo de cabeza, andando sobre mis manos!)»

«Si un chico le regala una naranja a una chica, su amor por él se multiplicará.

(No viene al caso. Ningún chico me ha regalado jamás una naranja.)»

         A los 13 años, Noah es un chico introvertido al que molestan los demás por su forma de ser, que le encanta pintar y que está enamorado de su nuevo vecino, Brian; Jude, por su parte, es todo lo contrario a su hermano, a ella le encanta hacer cosas intrépidas, ser el centro de atención y le gusta un joven mayor. Tres años después, se mantiene el sistema de los opuestos en la caracterización de los mellizos, sólo que el contraste también se produce entre ambas épocas, puesto que en esta ocasión Jude es la introvertida, la que se sale del patrón y que destaca por su excentricidad y su reticencia a salir con muchachos, en tanto que Noah se ha vuelto popular, sale con chicas y ha dejado de pintar. Uno de los grandes aciertos de la novela es el desarrollo psicológico de los personajes, los mellizos del final no tienen nada que ver con los que aparecen al principio de la obra. Jandy Nelson hace un buen trabajo de introspección, y no sólo en Noah y Jude, sino también con los demás personajes.

         Aparte de los protagonistas, hay otro personaje del que me gustaría hablar: Oscar. El típico chico malo que abunda en todas las novelas juveniles, con la excepción de que este sí me lo creo y que me parece completamente realista. Se nota que Jandy Nelson conoce bien el estereotipo del chico con pasado trágico que justifica sus acciones, que es guapo y que es obvio que no le conviene a la protagonista, pero sabe cómo hacerlo más humano y que lo comprendas, incluso que empatices con él. Oscar tiene defectos y comete errores, pero también tiene virtudes y trata de mejorar como persona, fue un personaje que me conquistó y se convirtió en uno de mis favoritos.

«Apuesto a que, en las fiestas, se recuesta contra la pared con una copa en la mano mientras chicas de piernas largas embutidas en vestiditos rojos se contonean frente a él. Seguro. No asisto a muchas fiestas últimamente, pero he visto un montón de películas y conozco a esa clase de chavo; el típico solitario sin ley con un huracán por corazón que causa estragos allá donde va: en las ciudades, en las chicas, en su propia vida trágica e incomprendida.»

Uno de los temas fundamentales es el arte, Noah pinta y Jude esculpe, pero no sólo ellos, la mayoría de los personajes tienen un lado artístico que les permite expresar lo que hay en su interior y externar la verdad que hay dentro de ellos. Por otro lado, el arte es la conexión entre los personajes, es un hilo que los entreteje y los mantiene unidos. La familia es el otro gran tema de Te daría el sol, las relaciones entre los integrantes y las situaciones por las que pasan son de gran relevancia para la trama, me gustaría ahondar más en este tema, pero les estaría dando varios spoilers.

«Verán: estoy segura de que he enloquecido. Voy perdiendo tuercas y tornillos por todas partes. Lo que me preocupa de mi padre y de Noah es que, por lo visto, creen estar bien.»

         Finalmente, Te daría el sol es un drama familiar bien construido que no deja ningún cabo suelto y cuyo final es poderoso e intenso. Se trata de una novela que cuenta con unos personajes realistas, que aborda temas delicados y que está escrita con un tono lírico, coincido con Tahere Mafi –autora de Shatter Me, su comentario aparece en las solapas del libro– cuando dice que la prosa de Jandy Nelson es “vivaz, arrebatadora [e] impregnada de pasión”. Te daría el sol me gustó muchísimo, aunque fue una historia que empecé con indiferencia, conforme pasaban las páginas me iba gustando más y más –algo que también me pasó con Segundas oportunidades de Rainbow Rowell, de la cual les traeré próximamente la reseña–, fue una lectura que me dejó muchas cosas y que seguro estará entre mis favoritas del año.

No me queda más que recomendarles ampliamente esta historia llena de mentiras, secretos, superstición, pasión, amor y arte.

FICHA: NELSON, Jandy, Te daría el sol, traducción de Victoria Simó, México: Alfaguara, 2016, pp. 421.

¿Les llama la atención? ¿Ya lo leyeron?

No olviden dejar sus comentarios ^^

Gracias por leer <3