Reseña: Los caballeros de la ciencia, Juan Soto Miranda

¡Hola a todos! Ya tenía mucho rato que no les traía una reseña, pero esta semana se los voy a compensar con una avalancha de ellas, casi una diaria, tanto de libros como de películas. Empecemos hablando de la que toca hoy, el autor, Juan Soto Miranda, fue muy amable al tomarme en cuenta para leer su obra y hacer su respectiva reseña, le agradezco mucho su consideración, además de que me emocionó mucho ya que se trata de la primera colaboración del blog, por lo mismo siento bastante la tardanza con la escritura de la presente entrada. ¿Les parece si iniciamos?

Los caballeros de la ciencia de Juan Soto Miranda (Madrid, 1974) comienza con el aviso a la Guardia Civil de un asesinato triple, cuando las autoridades van a investigar si la denuncia es verdadera, descubren a tres hombres crucificados. La escena emula la crucifixión de Cristo, sólo que en este caso quien ocupa el lugar del hijo de Dios es un famoso misionero llamado Jesús López. La sargento María Ballesteros, así como el resto de los encargados del caso, se encuentran con una investigación en la que avanzan un paso y regresan dos. ¿Cuál es la relación entre las víctimas? ¿Qué significan las inscripciones “CC” en las cruces? ¿Qué tiene que ver en todo esto la familia Harrington, quienes tienen un imperio empresarial? ¿Cuál es el misterio de Jesús López? ¿Cuáles fueron las revelaciones perturbadoras que le hicieron? Pero lo más importante de todo, ¿quiénes son los “Caballeros de la ciencia?

La novela cuenta con un narrador omnisciente que se encarga de proporcionarle al lector el panorama completo de lo que está sucediendo, de tal manera que, aunque los personajes no tienen toda la información de los hechos, el lector ya sabe quiénes mienten y cuáles son sus motivos para hacerlo. Pese a que el lector va adelantado y conoce de primera mano los descubrimientos y el papel que juegan los personajes en el tablero, el narrador se cuida muy bien de no revelar los secretos vitales, es así que la gran incógnita de quiénes son los “Caballeros de la ciencia” y cuál es su propósito no son revelados inmediatamente, además de que el máximo secreto de la obra se mantiene en las sombras hasta que es insostenible su velo.

El misterio de quién mando a cometer el crimen y las declaraciones perturbadores que le hicieran a Jesús López cuando estaba vivo son los ejes de la historia, aunque sobre ambas cuestiones se eleva la importancia que se le da a la familia Harrington, quién es la verdadera fuente e hilo conductor de la historia. El autor hace un buen manejo de la intriga, coloca bien las piezas de esta historia y la desarrolla de tal manera que la respuesta a la interrogante principal siempre parece escurrírsele al lector. El desenlace, por otra parte, resulta insatisfactorio, si bien el conflicto tiene una resolución aceptable y el giro argumental es sorpresivo, la manera en la que se lleva a cabo es precipitada y el epílogo resulta un tanto cursi.

El punto débil de la novela son los personajes, los cuales son planos. El autor trata de darle protagonismo a la sargento María al mostrar aspectos de su vida y profundizar en su carácter, sin embargo, esta acción no logra su cometido, por el contrario, lo único que consigue es agregar información irrelevante y que no contribuye nada a la historia; en cambio, otros personajes aparecen mejor delineados –sin la necesidad de recurrir a proporcionar información que parece metida con un calzador–, como lo es el propio Jesús López, cuya voz oímos a través de sus diarios.

Para terminar, Los caballeros de la ciencia está conformada por capítulos breves que agilizan la lectura y provocan que no quieras abandonar la lectura hasta resolver el misterio. Por tratarse de un thriller de índole religiosa, recuerda por momentos a las novelas de Dan Brown –autor que se menciona a lo largo de sus páginas–, pero Juan Soto Miranda presenta una historia que logra sobresalir por sí misma y cuyo desarrollo es realista, además de que es agradable ver que los hechos se desarrollan en España.  Se trata de una novela que disfrute y, para ser la primera obra de Juan Soto Miranda, el resultado ha sido bueno; aunque hay aspectos flojos, destaca la habilidad del autor al momento de construir la intriga.  Si tuviera que darle una puntuación sería de 3 estrellitas de 5.

¿Les llama la atención? ¿Le darán una oportunidad?

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